Lectura obligada
En una a modo de segunda
parte o continuación de su célebre longseller
Feminismo para principiantes, la
periodista Nuria Varela trata de
poner orden en todo lo acontecido en la teoría y el movimiento feministas a
partir de los años ochenta del siglo pasado. “Necesitamos acabar de reconstruir
una gran genealogía feminista, sin
papeles secundarios, en la que no olvidemos a nadie… Aunque si ya Adolfo
Posada se quejaba, a finales del siglo XIX,
de lo difícil que era seguir la 'marcha' al movimiento feminista de entonces,
en este momento se trata de una tarea inmensa, sin duda, pero tan colosal como
imprescindible y urgente.” Nuria ha llamado Feminismo 4.0 a este intento de alcanzar todas las incorporaciones,
giros y tendencias acaecidos en las últimas décadas, en alusión –me imagino— a
esa cuarta ola en que se integran y a la sociedad de la información con sus
dispositivos digitales. Los impulsos llegados del feminismo negro y chicano;
los problemas acarreados por la teoría queer; la interseccionalidad; el
ecofeminismo; la globalización; la gradual pérdida de significado del término 'género'; la “agenda sobrevenida” (a saber, ciertos temas
–como los vientres de alquiler— que no estaban en el horizonte y a los que, de
repente, había que dar una respuesta)… son múltiples y diversos los envites que
el feminismo, tanto en el plano teórico como en las acciones concretas del movimiento, ha atravesado en las
últimas décadas. Y de los que, según Nuria, ha salido victorioso convirtiéndose
en ese “conjunto complejo de temáticas concernientes a la transformación global
de las formas de vida en sociedad bajo los ideales de emancipación, justicia
social, libertad y no discriminación” que es en la actualidad. Intergeneracional,
global, e imparable. Feminismo 4.0, la cuarta ola constituye un trabajo muy completo, rabiosamente actual (la
bibliografía incluye publicaciones de justo antes del verano) que, además, culmina
en una nota optimista con respecto a la gran cantidad de mujeres jóvenes que,
de un tiempo a esta parte, se han incorporado al feminismo, con su rabia, su coraje y su frescura original. Felicidades,
Nuria.
Comentarios
Publicar un comentario